“No hay elementos que permitan sostener que tales relatos se produjeron”, sentenció Carabineros al objetar el informe emitido la semana pasada por Human Rights Watch (HRW), tras dos semanas de observación de la crisis social que afecta al país y el desempeño que ha tenido la policía respecto de su trato hacia los civiles durante la contención del orden público.
Si bien la institución encargada del orden y la seguridad interna del país valoró las recomendaciones que la entidad entregó para mejorar su gestión y procedimientos, refutó las conclusiones del documento divulgado por el director de la entidad para América Latina, José Miguel Vivanco.
Cabe recordar que el representante de HRW señaló entonces que “las fuerzas de Carabineros, las fuerzas encargadas de proteger el orden público, en nuestra opinión, cometen en ese tipo de tareas, en esos esfuerzos, graves violaciones a los derechos humanos y, es predecible que de no introducirse reformas urgentes en estas prácticas, estos abusos van a continuar”.
Los descargos de la policía uniformada también están contenidos en el reporte de 32 páginas sobre su gestión en estos días de crisis que le solicitó el Gobierno y en el que reitera su condena cualquier conducta por parte de algunos de sus integrantes que implique “un uso excesivo de la fuerza en las calles”.
No obstante ello, negó las acusaciones más graves, como los hechos de torturas o abusos sexuales, subrayando que “no hay elementos que permitan sostener que tales relatos se produjeron”.
Al respecto, Carabineros precisó que las cifras que maneja distan mucho de las entregadas por Human Rights Watch, ya que ésta denunció que 1.051 personas fueron heridas por disparos de perdigones, las que la fueron cifradas por la institución policial en 376, y “cuya autoría aún no se encuentra determinada por los órganos persecutores”.
En cuanto a la cantidad de gente atendida por los servicios médicos también difiere en gran medida dependiendo del documento que se consulte. HRW dice que éstas alcanzaron 11.564, pero la policía uniformada dice que ésta es considerablemente menor con 1.195.
En relación a los fallecidos, Carabineros sólo ha mencionado el caso de Álex Núñez Sandoval, quien murió tras una recibir una golpiza cometida supuestamente por miembros de esa fuerza policial, frente a las 26 muertos que entregó la ONG internacional.
“No existen personas fallecidas a causa del uso de armas de fuego por parte de Carabineros de Chile”, subrayó el documento, en el que también da cuenta que reforzará el entrenamiento en el uso de armas no letales.
Asimismo, HRW denunció 74 casos de abusos sexuales de distinta índole y la institución aseguró que hay investigaciones en curso al respecto e insistió en que no hay “elementos de convicción que permitan sostener la efectividad de tales relatos”.
La Fiscalía ofreció la semana pasada un informe en el cual se recopilaban hasta ahora 2.670 casos en los que Carabineros y otras fuerzas policiales y militares del país habrían incurrido en delitos contra los Derechos Humanos.
El balance publicado especificó que 422 de las víctimas eran menores de edad y 41, extranjeras. También fueron denunciados 116 delitos que atentaban contra la dignidad y la integridad sexual. Asimismo, se recogieron 720 casos de lesiones por arma de fuego y 44 de tortura.
https://lanacion.cl/2019/11/26/human-rights-watch-los-abusos-de-carabineros-son-conductas-que-se-han-ido-reiterando/
Si bien la institución encargada del orden y la seguridad interna del país valoró las recomendaciones que la entidad entregó para mejorar su gestión y procedimientos, refutó las conclusiones del documento divulgado por el director de la entidad para América Latina, José Miguel Vivanco.
Cabe recordar que el representante de HRW señaló entonces que “las fuerzas de Carabineros, las fuerzas encargadas de proteger el orden público, en nuestra opinión, cometen en ese tipo de tareas, en esos esfuerzos, graves violaciones a los derechos humanos y, es predecible que de no introducirse reformas urgentes en estas prácticas, estos abusos van a continuar”.
Los descargos de la policía uniformada también están contenidos en el reporte de 32 páginas sobre su gestión en estos días de crisis que le solicitó el Gobierno y en el que reitera su condena cualquier conducta por parte de algunos de sus integrantes que implique “un uso excesivo de la fuerza en las calles”.
No obstante ello, negó las acusaciones más graves, como los hechos de torturas o abusos sexuales, subrayando que “no hay elementos que permitan sostener que tales relatos se produjeron”.
Al respecto, Carabineros precisó que las cifras que maneja distan mucho de las entregadas por Human Rights Watch, ya que ésta denunció que 1.051 personas fueron heridas por disparos de perdigones, las que la fueron cifradas por la institución policial en 376, y “cuya autoría aún no se encuentra determinada por los órganos persecutores”.
En cuanto a la cantidad de gente atendida por los servicios médicos también difiere en gran medida dependiendo del documento que se consulte. HRW dice que éstas alcanzaron 11.564, pero la policía uniformada dice que ésta es considerablemente menor con 1.195.
En relación a los fallecidos, Carabineros sólo ha mencionado el caso de Álex Núñez Sandoval, quien murió tras una recibir una golpiza cometida supuestamente por miembros de esa fuerza policial, frente a las 26 muertos que entregó la ONG internacional.
“No existen personas fallecidas a causa del uso de armas de fuego por parte de Carabineros de Chile”, subrayó el documento, en el que también da cuenta que reforzará el entrenamiento en el uso de armas no letales.
Asimismo, HRW denunció 74 casos de abusos sexuales de distinta índole y la institución aseguró que hay investigaciones en curso al respecto e insistió en que no hay “elementos de convicción que permitan sostener la efectividad de tales relatos”.
La Fiscalía ofreció la semana pasada un informe en el cual se recopilaban hasta ahora 2.670 casos en los que Carabineros y otras fuerzas policiales y militares del país habrían incurrido en delitos contra los Derechos Humanos.
El balance publicado especificó que 422 de las víctimas eran menores de edad y 41, extranjeras. También fueron denunciados 116 delitos que atentaban contra la dignidad y la integridad sexual. Asimismo, se recogieron 720 casos de lesiones por arma de fuego y 44 de tortura.
https://lanacion.cl/2019/11/26/human-rights-watch-los-abusos-de-carabineros-son-conductas-que-se-han-ido-reiterando/