“A partir del día 6 de diciembre iniciamos el servicio de internet desde los móviles”, dijo Mayra Arevich, presidenta de la compañía estatal de telecomunicaciones Etecsa, a la televisión.
Etecsa había realizado varias pruebas de 3G en los últimos meses, pero la prueba final, a principios de septiembre y que ofrecía acceso gratuito durante 72 horas a 1,5 millones de usuarios, concluyó por “dificultades de conexión y congestión” de los servicios de voz y datos, debido a la “inestabilidad” de parte de la red, según la empresa.
La tarifa propuesta será de 10 centavos de dólar por megabyte (reducido a dos centavos por navegar en sitios web cubanos), con paquetes que van desde siete dólares por 600 megabytes a 30 dólares por cuatro gigabytes.
El salario promedio en Cuba para los empleados públicos (87% de la población ocupada) es de 30 dólares por mes.
A fines de 2016, Cuba firmó un acuerdo con Google para una conexión más rápida al contenido en línea del gigante estadounidense.
Pero el acceso a internet no mejoró en la isla desde entonces: sigue siendo particularmente limitado, lento y costoso para los hogares.
La mayoría de los residentes no tienen más remedio que conectarse a puntos wifi públicos, pagando por hora.