Preocupación e incertidumbre en el mercado financiero y de casinos generó el acuerdo informado desde el Grupo Enjoy de fusionar la cadena de casinos con su competidora Sun Dreams, decisión tomada por los acreedores y futuros máximos accionistas.
La decisión encendió las alertas, especialmente al interior de los integrantes de la Comisión Investigadora de Casinos que sesionó durante el 2020 en la Cámara de Diputados y donde se abordó ampliamente la crisis de Enjoy como el rol de la Superintendencia de Casinos con la industria.
Al respecto, el diputado y presidente de la CEI, Rodrigo González, manifestó su preocupación del acuerdo, apuntando a una responsabilidad de la Superintendencia en beneficio de Enjoy.
“Los acuerdos de la Comisión Investigadora fueron visionarios, la negligencia, desidia y complicidad de la Superintendencia de Casinos quedan al desnudo. En efecto, Enjoy no era viable y jamás la Superintendencia debió haberle adjudicado los casinos municipales con perjuicio del Fisco, municipios y gobiernos regionales. El grupo Penta y los acreedores que se asociaron con Enjoy para sacarlo de la crisis, capitalizarlo y permitir que no fracasara la reorganización solicitada, finalmente venderán su participación con pingües utilidades aprovechando la benevolencia y permisividad de la Superintendencia”, explicó.
Para fiscalizar que esta fusión entre Enjoy y Dreams se ajuste a la ley, González ofició a diversos organismos y pedirá la próxima semana poner en tabla el Informe de la Comisión Investigadora que ha sido dilatado por varias semanas.
“Oficiamos a la Superintendencia de Casinos para que informe si esta operación está dentro de la legalidad que le corresponde supervigilar, a la Comisión para el Mercado Financiero, y también a la Fiscalía Nacional Económica para que diga si existen riesgos de concentración de mercado, de integración, y de una posición dominante en el mercado que la haga monopólica en la oferta de servicios, junto a ello solicitaremos a la Contraloría la inmediata intervención para fiscalizar la legalidad del procedimiento. Además, pediremos abrir una nueva Comisión para investigar eventuales triangulaciones, el cumplimiento de las normas legales y de las obligaciones de organismos fiscalizadores y que se ponga en tabla con urgencia el informe de la primera Comisión Investigadora que está pendiente”, añadió.
Ante la importancia del negocio y su magnitud, González cuestionó que la Superintendencia no estuviese informada, para no haber anticipado cualquier acción de fiscalización.
“La familia Martínez perderá el control y una empresa competidora de Enjoy está a punto de beneficiarse doblemente de todo el negocio que hasta ahora era de absoluto secreto. Estamos ante un inminente escándalo financiero de permisividad, intereses y negocios cruzados de gran envergadura. El actuar de la Superintendencia llevó a una concentración sin precedentes y resulta poco creíble que no supieran nada de este gran negocio e intereses cruzados”, finalizó el parlamentario.