El secretario de Estado sostuvo que era una idea lógica la de prorrogar por dos años la entrada en vigencia a fin de que el sector se adapte. “Nosotros considerábamos sensato prolongar el tiempo de adaptación para que cuando la ley entre en vigencia estuviera bien preparado el sector pesquero de manera de evitar el desempleo que de otra manera se puede provocar”, remarcó Según los datos de Fontaine, el rechazo a la prórroga “es dejar en el mar 150 millones de dólares de exportaciones que se habrían estado provocando si pudiera ser pescada esa jibia y significar que se pierden empleos en las plantas de proceso (…) aquí estamos sacrificando empleos y exportaciones”.
Respecto a si el Gobierno volverá a presentar la iniciativa en el Senado, el ministro de Economía expresó que “es algo que vamos a evaluar”.
“La decisión acá -Cámara Baja- tomada no es una decisión responsable y obedece a un intento de administrar materias técnicas por la vía legal, lo cual nosotros consideramos que es erróneo”, dijo el titular de Economía.
Añadió que los antecedentes técnicos muestran que la jibia se ha alejado de las costas nacionales, de ahí la necesidad, dijo, de postergar la entrada en vigencia de la ley.