Poco a poco comienza a repararse la falta de equidad de género en los altos cargos de las empresas, compañías e instituciones del país. Si bien la diferencia sigue siendo en un grado importante a favor de la presencia masculina, el porcentaje de cargos C-level ocupados por mujeres aumentó 17% en los últimos 4 años, según cifras de Page Executive, expertos en reclutamiento especializado.
“El aumento en términos de participación de la mujer en cargos directivos en Chile ha sido relevante, considerando que la base de partida era un escenario crítico, en el cual la mujer simplemente no estaba presente en los cargos estratégicos y de toma de decisión de las empresas”, afirma Nathalia Molteni, Associate Director de Page Executive.
Además, la experta agrega que “la discusión se ha abierto en distintos ámbitos y la mirada desde la diversidad ha sumado mucho valor, pues no se habla solamente de que las mujeres no están, sino se enfatiza en el valor agregado que la mujer puede dar a las organizaciones”.
A pesar del alza, Chile sigue estando bajo la media en Latinoamérica con sólo 13% de presencia femenina en altos cargos frente al 20% que muestra la región. Donde mejor posicionado está nuestro país es en la participación de mujeres en los directorios, alcanzando 9% , dos puntos sobre el promedio latinoamericano. “La primera línea gerencial suele estar conformada por tres a ocho ejecutivos de los cuales uno a tres son mujeres. La mayoría de estos cargos suelen ser en recursos humanos, finanzas y/o marketing”, explica Molteni.
El sector público, en cambio, muestra el mejor panorama, ya que las cifras del Servicio Civil indican que la participación de mujeres en los cargos de alta dirección supera el 30%, e incluso aumentan a 42% al considerar únicamente los directorios de empresas del SEP (Sistema de Empresas de la Corfo).
Según Page Executive, entre los rubros donde existe mayor presencia de mujeres en altos cargos destacan las industrias de consumo masivo, retail, farmacéuticas y la industria de servicios en general, mientras que las principales características que se buscan para puestos ejecutivos no se diferencian de las cualidades de sus colegas masculinos. Liderazgo, pensamiento estratégico y ejecución, habilidades técnicas y tecnológicas, construcción de equipos y networking, gestión del cambio, comunicación y presentación e integridad, son las virtudes más valoradas.