El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Linares condenó a Francisco Alejandro Jiménez Fuentes (23) a la pena de presidio perpetuo, en calidad de autor del delito consumado de violación con homicidio contra Adriana Inés Rosales Barros (67) ilícito perpetrado en abril de 2018, en el sector Huapi Alto de la mencionada comuna.

Jiménez Fuentes también fue condenado a la pena de 61 días de presidio y una multa de 5 UTM, como autor del delito consumado de hurto simple.

Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.

El tribunal dio por establecido, más allá de toda duda razonable, que entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de abril de 2018, en un domicilio ubicado en el callejón Los Paltos, en el sector de Huapi Alto de la comuna de Linares, se encontraba sola la víctima, Adriana Inés Rosales Barros, lugar al que llegó Jiménez Fuentes, quien era cliente habitual del local clandestino de alcoholes que mantenía la víctima, en donde la violó y agredió. Posteriormente le provocó múltiples heridas cortopunzantes en su cuello, además de fracturarle dos cervicales, provocándole la muerte.

“A continuación, con un destornillador, Jiménez Fuentes forzó diferentes muebles de la casa habitación en búsqueda de especies de valor, sustrayendo al menos entre $150 mil a $180 mil que la víctima mantenía producto de su pensión, aportes de INDAP e ingresos de su negocio de venta de alcoholes, además de un teléfono celular”, detalla la resolución.

Finalmente, el sentenciado envolvió el cuerpo de la víctima con un cobertor, la subió a una carretilla que estaba en el domicilio y la llevó hasta un canal de regadío existente a unos 50 metros de la casa habitación lanzándola al agua, “la que por su caudal causó el arrastre de dicho cuerpo varios metros hacia el poniente, donde posteriormente fue encontrado. Después de eso, regresó a la casa con la carretilla, la dejó en el lugar, tomó la almohada con sangre y la tiró sobre el techo de la casa y cerró el candado con la cadena en la misma posición que la dejaba la víctima”.

De esta forma, Jiménez Fuentes deberá pasar toda su vida en prisión teniendo solo la posibilidad, después de haber cumplido 20 años de pena efectiva, de postular a algún tipo de beneficio intrapenitenciario.