El secretario de Guerra, Pete Hegseth, anunció en una reunión extraordinaria con generales y altos mandos que dará curso a directrices con el objeto de reinstaurar el “más alto estándar masculino” dentro del Ejército, introduciendo nuevos requisitos físicos para impedir la presencia de soldados “gordos” y con barba.
“Hoy, bajo mi dirección, cada servicio se asegurará de que todos los requisitos para cada combatiente (…) se ajusten exclusivamente al más alto estándar masculino. (…) La era del liderazgo políticamente correcto y excesivamente sensible termina ahora mismo”, afirmó Hegseth, recogió Emol.
La inédita asamblea, que contó con la presencia del presidente Donald Trump, se desarrolló en una base del Cuerpo de Infantería de Marina en Quantico (Virginia), a unos 60 km de Washington, en medio de crecientes especulaciones sobre posibles purgas en los altos mandos.
El jefe del Pentágono fustigó la existencia de “soldados gordos” dentro de las filas y sostuvo que resulta “completamente inaceptable” y una mala imagen ver “generales y almirantes gordos”, ordenando que todo militar sea sometido a exámenes físicos y mediciones dos veces al año.
Dentro de las 10 directivas declaradas se prevén “estándares de aseo personal” para erradicar barbas, cabello largo y expresiones “superficiales e individuales”; una revisión de toda la educación militar profesional; y la eliminación de políticas de diversidad, equidad e inclusión (DEI).
Hegseth añadió: “No quiero que mi hijo sirva junto a tropas que no están en forma ni en unidades de combate, con mujeres que no pueden cumplir con los mismos estándares físicos de combate que los hombres”.
En cuanto al liderazgo, el secretario de Guerra insinuó transformaciones al sostener que “durante demasiado tiempo se ha ascendido a demasiados líderes uniformados por razones equivocadas: por su raza, por cuotas de género y por supuestos logros históricos”.
“No más cambio climático. No más división, distracción ni delirios de género (…) hemos terminado con esa mierda”, remató.
Hegseth, antiguo oficial del Ejército de Tierra, y crítico declarado de lo que considera una “ideología liberal” en la cultura militar, ha destituido ya a varios generales desde que asumió el cargo a comienzos de este año. En mayo anunció su objetivo de reducir en al menos un 20 % a los generales y almirantes de cuatro estrellas.