América Latina crecerá apenas 0,5% este año, cifra muy por debajo del 1,3% estimado en abril, debido a un deterioro económico generalizado, en especial de América del Sur debido en parte al derrumbe de Venezuela, según las proyecciones de Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
“A diferencia de años anteriores, en 2019 la desaceleración será generalizada y afectará a 21 de los 33 países de América Latina y el Caribe. En promedio, se espera que América del Sur crezca 0,2%, América Central 2,9% y el Caribe 2,1%”, señala el reporte de la entidad que encabeza Alicia Bárcena.
En ese sentido, indicó la autoridad, la “incertidumbre y desaceleración” son los principales factores que incidirán en la baja de la estimación. “Llevamos cinco años de desaceleración económica, esto es un tema de enorme preocupación”, advirtió la secretaria ejecutiva de la Cepal durante la presentación del informe en Santiago.
El texto sostiene que el colapso de la economía venezolana, que sufriría una baja de 23% este año, empuja el desplome del vecindario, ya que la crisis del el país caribeño arrastra a las economías del Cono Sur, que también sufren con el retroceso de 1,8% previsto para Argentina, detalla el informe.
Un escenario global desfavorable -con fuertes caídas en precios de los commodities- y el bajo dinamismo del mercado interno en la mayoría de los países, empujan fuertemente esta caída del crecimiento, que en 2018 cerró con una expansión de 0,9%, acota la estimación.
Más allá del retroceso de Argentina y Venezuela, el gigante sudamericano Brasil cerraría el año con una débil expansión de 0,8%, lejos del dinamismo que muestran las economías de Perú, Colombia y Chile, con avances de 3,2%, 3,1% y 2,8%, respectivamente.
En América del Norte destaca la tibia expansión de México (1,0%), inmersa en una relación conflictiva con Estados Unidos.
Bárcena calificó de “muy mediocre” el crecimiento de casi toda la región, con excepción de América Central que crecerá 2,9% gracias a la fuerza de las remesas.
“A diferencia de años anteriores, en 2019 la desaceleración será generalizada y afectará a 21 de los 33 países de América Latina y el Caribe. En promedio, se espera que América del Sur crezca 0,2%, América Central 2,9% y el Caribe 2,1%”, señala el reporte de la entidad que encabeza Alicia Bárcena.
En ese sentido, indicó la autoridad, la “incertidumbre y desaceleración” son los principales factores que incidirán en la baja de la estimación. “Llevamos cinco años de desaceleración económica, esto es un tema de enorme preocupación”, advirtió la secretaria ejecutiva de la Cepal durante la presentación del informe en Santiago.
El texto sostiene que el colapso de la economía venezolana, que sufriría una baja de 23% este año, empuja el desplome del vecindario, ya que la crisis del el país caribeño arrastra a las economías del Cono Sur, que también sufren con el retroceso de 1,8% previsto para Argentina, detalla el informe.
Un escenario global desfavorable -con fuertes caídas en precios de los commodities- y el bajo dinamismo del mercado interno en la mayoría de los países, empujan fuertemente esta caída del crecimiento, que en 2018 cerró con una expansión de 0,9%, acota la estimación.
Más allá del retroceso de Argentina y Venezuela, el gigante sudamericano Brasil cerraría el año con una débil expansión de 0,8%, lejos del dinamismo que muestran las economías de Perú, Colombia y Chile, con avances de 3,2%, 3,1% y 2,8%, respectivamente.
En América del Norte destaca la tibia expansión de México (1,0%), inmersa en una relación conflictiva con Estados Unidos.
Bárcena calificó de “muy mediocre” el crecimiento de casi toda la región, con excepción de América Central que crecerá 2,9% gracias a la fuerza de las remesas.