El expárroco de El Bosque se hizo conocido a causa de múltiples acusaciones en su contra producto de abusos sexuales a menores de edad en 2004, hecho por el que fue suspendido de por vida de sus funciones eclesiásticas.
A través de un breve comunicado, la Iglesia Católica ratificó el cambio hasta el mencionado hogar. De acuerdo al texto, la medida responde a “razones internas” y fue autorizada por la Congregación de la Doctrina de la Fe de la Santa Sede.
Karadima fue condenado por el Vaticano por abuso sexual de menores en 2011, y pese a los intentos de las víctimas, la justicia chilena consideró que la causa había prescrito.
Tras conocerse de los hechos, el Vaticano lo declaró culpable y lo sentenció a retirarse a una vida de oración y penitencia.