Home Actualidad "Ávila y marcha que pide su salida: “la cartera d...

Ávila y marcha que pide su salida: “La cartera de Educación es siempre compleja”

Sobre el petitorio de los estudiantes, el ministro de Educación afirmó que "todos estos puntos son parte de nuestras demanda. Muchos de nosotros venimos de los movimientos sociales, es un Gobierno que está encabezado por un Presidente que fue un destacado dirigente estudiantil".
Comparte esta noticia

La Coordinadora Secundaria Revolucionaria (CSR) convocó a las 12:30 horas de este jueves en Plaza Baquedano a una marcha pidiendo la renuncia del ministro de Educación, Marco Antonio Ávila.

“¡Basta de ilusiones, queremos soluciones! Fuera Ávila”,
consigna el afiche de la agrupación estudiantil, siendo la primera vez que el secretario de Estado es directamente interpelado en el marco de las protestas de secundarios.

Consultado por la convocatoria, el ministro afirmó en Meganoticias que “la cartera de Educación siempre es bien compleja. Porque tenemos muchas demandas, muchas de ellas no resueltas en varios años y en décadas incluso. Nosotros, los ministros, siempre estamos muy expuestos”.

Sin embargo, aclaró que su permanencia “es una prerrogativa del Presidente de la República, ahí no tengo mucho más que decir”.

En sus redes sociales, la CSR publicó una serie de demandas, entre las que aparece transporte público gratuito; mejora de infraestructura; alimentación Junaeb “adecuada y proporcional”; mejora de la atención de salud mental; educación de salud sexual integral; entre otras.

Sobre el petitorio, Ávila afirmó que “todos estos puntos son parte de nuestras demanda. Muchos de nosotros venimos de los movimientos sociales, es un Gobierno que está encabezado por un Presidente que fue un destacado dirigente estudiantil”.

A modo de ejemplo, mencionó que “las licitaciones de Junaeb están otorgadas el año anterior. Ahora vamos a modificar algunas de esas licitaciones, probablemente haciendo una introducción de elementos que nos permitan tener mayor regulación de la calidad y cantidad de alimentos”.

“Ya hemos ido haciendo, en conversación con estos oferentes, algunas mejoras en la alimentación. Sabemos que hay deudas todavía pendientes, probablemente porque el servicio está en manos de una empresa, que no necesariamente está relacionada con el ministerio”, complementó.

DOS GRUPOS DE ESTUDIANTES


Frente a los hechos de violencia que se han desarrollado en el contexto de las manifestaciones estudiantiles, el ministro pidió “distinguir dos grupos de estudiantes. No hay que hacer un deslinde muy claro. Hay estudiantes con los que yo entiendo que es posible poder avanzar en ciertos diálogos”.

Por otro lado, apuntó a “actos que yo he calificado derechamente de carácter delictual. Cuando un estudiante le vierte bencina a una profesora o profesor, o amenaza a un compañero para que se sumen a movilizaciones, estamos hablando de un acto delictual. Y frente a eso, el Ministerio del Interior ha venido actuando, y cuando estos estudiantes son sorprendidos en flagrancia, tienen que hacerse responsables de estos actos”.

El secretario de Estado se preguntó: “¿Qué pasa con los padres, madres o cuidadores de esos estudiantes cuando vuelven a sus casas? Probablemente deben identificar o saber que está pasando en el colegio, o preguntarán (…) Ahí hay una conversación que los adultos tienen que hacer y tienen que hacerse responsables”.

“Los estudiantes que cometen hechos de este tipo, sobre todo en la vía pública, tendrán que asumir las consecuencias, porque ahí tiene que actuar la fuerza pública”, enfatizó.

Además, aseveró que “estos estudiantes, a veces a mí me da la impresión que no tienen derechamente un petitorio o una reclamación justa respecto a lo educativo. Porque cuando usted está quemando un bus, está afectando al propio pueblo que se traslada a trabajar en estos buses. O cuando detiene el Metro, está complejizando la vida de personas que vienen cansadas de su trabajo, y lo que necesitan es poder descansar”.

“La ciudadanía ya no da para más. No tenemos más espacio para este tipo de acciones, sobre todo pensando que cuando asumí el ministerio lo hice como profesor, desde el diálogo y la acción formativa”, zanjó.

En el caso del Instituto Nacional, afirmó haberse reunido con el Consejo Escolar y advirtió que el problema “esencial” del establecimiento “tiene relación con el mobiliario escolar, que es muy antiguo. Y eso no ha sido mejorado durante décadas, estamos hablando desde que se creó, probablemente tiene el mismo mobiliario, tiene más de 80 o 90 años”.

“Lo mismo pasa con el Internado Nacional Barros Arana, con quien yo también me he juntado con centros de estudiantes. Y hoy día, tengo un petitorio o una solicitud más específica de todos los establecimientos, quedaron de hacérmelo llegar, lo voy a tener prontamente”, agregó.

INFRAESTRUCTURA

Precisamente una de las demandas que más se repite en las protestas de secundarios tiene relación con los problemas de infraestructura. Al respecto, el ministro recordó que “al hacernos cargo del Gobierno el 11 de marzo, inmediatamente comenzamos la implementación de la política de reactivación educativa integral que hemos dado a conocer al país. Esto implica cinco de ejes, y uno de ellos, el quinto, tiene relación con la infraestructura escolar”.

Remarcó que “nosotros, tomando los recursos disponibles hemos hecho una reasignación, y hemos podido implementar estas mejoras por más de 60 mil millones de pesos, en proyectos que han ido presentando los distintos establecimientos a lo largo del país”.

“Yo creo que nosotros como país tenemos una deuda importante en infraestructura. Ahora, vamos a iniciar el catastro de infraestructura escolar que termina el primer semestre del 2023, y mi compromiso es presentarle al Presidente de la República, el segundo semestre del próximo año, un plan de reparación y recuperación de infraestructura, que vamos a trabajar con el Ministerio de Obras Públicas probablemente”, informó.

Ávila acusó que “el actual modelo de reparación y reposición de establecimientos educacionales es muy largo y engorroso también”, precisando que “desde que inicia un proyecto hasta que construye, a veces se demora hasta cuatro años”.

Además, explicó que “la asignación de recursos para la mantención de los establecimientos tiene que ser bien utilizada por los sostenedores. Si bien no es mucha plata la que recibe cada colegio año a año, es importante poder invertirla de buena forma, y además tener mantenciones permanentes”.

Comparte esta noticia
60,813FansLike
8,370SeguidoresSeguir
346,900SeguidoresSeguir

Lo Más Leído