Una investigación realizada por la Municipalidad de Nacimiento sugiere que las papas fritas podrían haberse originado en esta localidad chilena en 1629.

El descubrimiento se basa en el libro “Cautiverio Feliz” de Francisco Núñez de Pineda y Bascuñán, un soldado español que narra sus experiencias como prisionero mapuche en el Fuerte de Nacimiento durante la Guerra de Arauco.

El texto describe que “desde que nos asentamos a la mesa fueron tantas las ollas que ocurrieron con diferentes guisados, que sobró que comer para los pobres soldados que nos estaban sirviendo con su asistencia”.

En otro pasaje, se menciona que “porque las mujeres casadas del presidio y sus maridos, cuál envió la sopa, tostada con muchos huevos fritos por encima, cuál el guisado de pescado seco, y otros el marisco de choros secos, machas, ostiones y otros géneros; unas enviaban las papas fritas“.

Javier Arredondo, coordinador de la oficina de Turismo de la Municipalidad de Nacimiento, explicó a El Expreso Bío Bío que Raïssa Kordic, profesora de la Universidad de Chile, colaboró en la traducción del texto desde el español antiguo.

“Lo abordamos desde el punto de vista mapuche, porque acá estaba el Fuerte de Nacimiento. El fuerte era atendido por esclavos mapuches, ya que los españoles no cocinaban ni conocían los alimentos originarios de esa época”, señaló Arredondo.

Sin embargo, Arredondo precisó que no se debe imaginar la papa frita moderna: “Estamos hablando de las primeras incursiones en el territorio del Biobío. Los instrumentos eran rústicos. El libro menciona que en Biobío había animales, de los cuales habría salido el aceite animal. Además, otros textos hacen referencia a plantas de las que los mapuches obtenían aceite para freír”.