La polémica situación de Novak Djokovic en Australia, donde fue cancelada su visa al no estar vacunado, ha alcanzado dimensiones impensadas. Aun así, el serbio anunció en una sus historias de Instagram que “gracias a la gente de todo el mundo por su apoyo continuo. Puedo sentirlo y se lo agradezco mucho”.

Miles de personas en el mundo y autoridades serbias, como el mismo presidente del país, Aleksandar Vučić, han defendido a Nole. Vukic, incluso reclamó que el trato efectuado contra Djokovic ha sido “asqueroso”.

Su declaración, se suma a la que ya había realizado previamente a su circulo familiar, donde aseguró que “¡dios todo lo ve! La moralidad y la ética como los más grandes ideales son las estrellas que guían hacia la elevación espiritual. Mi gracia es espiritual, y su riqueza material”.

El tenista Rafael Nadal, también tuvo su opinión sobre el caso Djokovic, señalando que “él es una persona mayor de edad que toma sus propias decisiones y que tiene que pagar las consecuencias de esas decisiones… Si quisiera estaría jugando sin problemas en Australia”, lamentando de todas maneras la situación de confinamiento que le ha tocado vivir al número 1 del mundo.

Por su parte, el padre del serbio, Srdjan Djokovic, realizó unas polémicas comparaciones sobre el caso de su hijo, llegando a manifestar que “a partir de hoy, Novak se convertirá en un símbolo y líder del mundo libre (…). Mi hijo es como Jesucristo, a quien crucificaron. Los quieren crucificar, humillar y echar de rodillas. Esto es una lucha política que no tiene nada que ver con el deporte”.

Luego de conocerse la noticia de la cancelación de la visa del deportista, el primer ministro australiano, Scott Morrison, alabó la decisión y justificó que “las reglas son reglas, especialmente cuando se trata de nuestras fronteras. Nadie está por encima de estas reglas”.

Además, durante este viernes, diferentes medios han trascendido la información de que la Federación Australiana de Tenis, no informó que se podrían invalidar las solicitudes de exenciones médicas a quienes argumentaran no haberse vacunado por haber contraído el virus en los seis meses anteriores.

Este lunes, el magistrado australiano, Anthony Kelly, determinará lo que pasará con el tenista y si podrá disputar o no el Abierto de Australia, a realizarse entre el 17 y 30 de enero, luego de escuchar los argumentos de ambas partes.