El concierto del artista británico-estadounidense, Billy Idol, debió ser interrumpido en la noche del jueves, debido a disturbios que se produjeron en las afueras del Teatro Caupolicán cuando personas intentaron ingresar a la fuerza al recinto.
El intérprete de éxitos como “Dancing With Myself”, “Flesh for Fantasy”, “Speed”, “Eyes Without a Face” y “White Wedding” debió detener su presentación por media hora, debido a la gran cantidad de humo de extintores en el interior y de gas lacrimógeno.
Una persona integrante de la organización del show salió al escenario e informó al público que “vamos a tomar una pequeña pausa, por favor. Estemos todos tranquilos. Vamos a tomar un descanso”.
Y agregó que “tenemos una pequeña situación que se está solucionando en la entrada, para que el artista pueda respirar un poco, por el tema del olor de las lacrimógenas. Así que, por favor, mantener la calma. No se retiren porque afuera está todo con policías, así que tranquilos, tranquilos. Les pedimos unos minutos, por favor”.
El cantante, a través de su cuenta de Instagram, comunicó en ese momento que “algunos punks intentaron colarse en el concierto… La policía antidisturbios les lanzó gas lacrimógeno, se filtró en el auditorio, así que tuvimos que suspender el concierto… ¡Pero volveremos al escenario pronto!”.
En el interior del teatro, que estaba repleto, también se produjeron algunos incidentes, cuando público de la platea y galerías se pasaron al sector de cancha.
Después de las 22:00, el artista volvió al escenario. Antes de su última canción, Billy Idol afirmó que “fue una noche increíble: hubo gas, policía…”.