Una voluntaria de la Primera Compañía del Cuerpo de Bomberos de Rancagua denunció apremios ilegítimos en su contra al interior de ésta.

Según informó El Tipógrafo, la bombera relató que fue sometida en contra de su voluntad a una especie de rito de iniciación durante una noche de guardia, en la que fue maniatada, encapuchada, despojada de parte de su ropa y forzada a mojarse en la ducha. Debido a esta situación fueron suspendidos de sus labores el capitán de la compañía y otros voluntarios.

La afectada informó que después de este hecho, tras cambiarse de ropa y tratar de dormir, el acto se repitió con mayor crudeza, lo que terminó con desilusionarse de la institución.

Y agregó que, tras los acontecimientos, su familia notó que ella se comportó de manera distinta manteniendo un silencio anormal, por lo que le preguntó qué había pasado. Fue en ese momento que la víctima narró lo sucedido, a lo cual la motivaron a realizar la denuncia en la institución.

El superintendente de Bomberos de Rancagua, Raúl Montecinos, señaló que “efectivamente, recibimos una denuncia de esa naturaleza e inmediatamente fueron suspendidos todos los involucrados en los hechos”.

Y explicó que “no es un ritual bomberil, para nada, y esto está en manos del consejo superior de disciplina que va a tener que resolver este caso, pero en el intertanto seguirán suspendidos los voluntarios”.

El superintendente indicó que “lógicamente condenamos profundamente estos hechos, y reitero que no es un ritual propio de nuestra institución”.

Además, argumentó que el capitán de la compañía fue suspendido “principalmente por ser responsable de la guardia nocturna”. Añadió que “como institución tenemos un protocolo de denuncia de acoso en general, sexual, bomberil o de cualquier tipo, y está aprobado por el directorio general en agosto de este año 2022, lamentablemente estamos expuestos a este tipo de situaciones”.