El futbolista iraní, Nasr Amir Azadani, fue condenado este lunes a 26 años de presidio por un tribunal revolucionario debido al supuesto asesinato de tres integrantes de las fuerzas de seguridad y otros dos delitos bajo el marco de las protestas que transcurren en el país persa.
El caso del futbolista se hizo viral y provocó críticas en todo el mundo, cuando asociaciones de futbolistas y medios internacionales anunciaron en diciembre su condena. Sin embargo, el futbolista fue condenado a 16 años debido a su complicidad en el asesinato de tres basijis -milicianos islámicos-, a cinco más por el cargo de reunión y colusión para cometer delitos y a dos por perteneces a grupos ilegales con la intención de perturbar la seguridad pública. La condena se llevará a cabo de manera simultánea, por lo que en un comienzo deberá cumplir 16 años en prisión.
En el mismo juicio, Saleh Mirhashemi, Majid kazemi Sheikh Shabani, y Saeed Yagoubi fueron sentenciados a muerte por “enemistad contra dios” debido al asesinato de los basijis en Isfahan. Además, los tres fueron condenados a 10 años de prisión. Un quinto acusado se suma a las condenas, Soheil Jahangiri, quien fue condenado a dos años de prisión por participar en los mismos hechos, y un sexto, Jaber Mirhashemi, fue absuelto. La agencia Mizan informó que cuatro de los acusados contaban con abogados propios, mientras que los otros dos lo hicieron con letrados de oficio.
