Un jurado de Nueva York, en EEUU, determinó este jueves que la productora del famoso actor, Robert De Niro, deberá pagar más de 1,2 millones de dólares a su exasistente personal, Graham Chase Robinson (41), tras perder una demanda por abuso laboral y discriminación de género.

A pesar de que la justicia decidió que el intérprete no era el responsable directo del abuso, concluyeron que su productora, Canal Productions, efectuará dos pagos de 632.142 dólares a la mujer. 

La disputa entre ambas partes inició en 2019, luego de que Robinson renunciara a la compañía después de 11 años. 

En la acusación, según consignó la BBC, Robinson aseguró que De Niro realizaba regularmente “comentarios vulgares, inapropiados y de género”, e indicó que le asignaba tareas “estereotípicamente femeninas”, como lavar sus sábanas. Además, denunció al actor de 80 años por contacto físico no deseado, y por no pagarle lo suficiente por ser mujer.

Por su parte, desde la productora presentaron una contrademanda, acusando a Robinson de malversación de fondos, robo de propiedad, y de haberse transferido más de $450.000 dólares en millas aéreas a su cuenta personal. Sin embargo, el jurado desestimó esta demanda. 

En tanto, mediante una declaración compartida con la Agencia AFP, el abogado de la mujer, David Sanford, expresó que “estamos complacidos de que el jurado viera lo que nosotros vimos y diera un veredicto a favor de Chase Robinson”. 

Cabe destacar que durante el juicio, el propio De Niro reconoció algunos de los hechos por los que era acusado. Por ejemplo, admitió que había reprendido a la mujer, y que en al menos dos oportunidades le pidió Robinson que le rascara la espalda, aunque aclaró que “nunca fui abusivo, nunca”.